Nuevo León.- Un ataque a balazos contra dos policías de San Pedro dejó como saldo a uno de los uniformados lesionado, mientras que su compañero resultó ileso.
La agresión se registró alrededor de las 2:30 horas en la Avenida Morones Prieto, a la altura de la calle Francisco Villa, en la Colonia Valles de Vasconcelos.
La Policía municipal guardó completo hermetismo y por cuestión de seguridad no reveló el nombre del elemento herido ni la forma en la que sucedieron los hechos.
Sin embargo, versiones señalan que el agente herido y otro de los elementos realizaban recorridos de vigilancia a bordo de la unidad 411 en diferentes puntos al poniente del casco municipal.
Cuando se desplazaban por la Avenida Morones Prieto fueron atacados por dos pistoleros que viajaban en un vehículo Tsuru.
Tras el ataque, los agresores huyeron hacia Santa Catarina.
El policía que logró salir ileso reportó por radiofrecuencia el ataque y pidió el apoyo de sus compañeros.
En un momento de confusión de los policías, los elementos de Rescate 911 fueron enviados a la Avenida Alfonso Reyes, donde no encontraron nada, por lo que después se dirigieron al lugar exacto, pero cuando llegaron al lugar el policía ya había sido trasladado por su compañero.
Trascendió que el elemento municipal sufrió una herida de entrada por proyectil de arma de fuego y otra de salida en la misma pierna izquierda.
El policía lesionado fue trasladado al Hospital San José por su compañero en la misma patrulla atacada, la cual fue escoltada por al menos otras 10 unidades que llevaban las sirenas y torretas encendidas.
El herido ingresó a la sala de urgencias donde fue atendido por el personal médico, que lo diagnosticó estable.
Mientras, frente al hospital permanecieron durante 10 minutos las patrullas a manera de protección.
Luego de que el uniformado fue estabilizado, socorristas de la Cruz Roja lo trasladaron a otro nosocomio.
Veinte minutos más tarde, un convoy compuesto por elementos del Ejército y policías municipales realizaron recorridos en busca de los agresores, pero presuntamente no los ubicaron.
El ataque ocurre a seis días de que el detective encargado de la Policía Ministerial en el municipio sampetrino, Antonio Montiel Álvarez, fuera privado de su libertad y después ejecutado en una brecha del municipio de Juárez.
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